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Cuando decidí optar por la candidatura a diputada en el 2006 presenté un programa de gestión que llamé DECÁLOGO DE PROPUESTAS, porque contenía diez grandes propósitos que me proponía cumplir, si lograba llegar al Congreso. Mucha gente creyó en mis propuestas, votó por mí y me convirtieron en la diputada más votada en la circunscripción número 3 de nuestra provincia.
Como lo prometido es deuda, según reza el dicho popular, he tratado de convertir en hechos lo que en su momento fueron solo palabras. En ese sentido, a manera de rendición de cuentas, paso a mencionarles algunas de las actividades en que he estado comprometida en estos tres años de gestión.
Para empezar, me gustaría resaltar la importancia de la revista “Magda: Presencia y compromiso” de la que han circulado unos 8 mil ejemplares en las cuatro ediciones publicadas hasta el momento. Esta revista se concibió como un vehículo de comunicación con las comunidades, los medios informativos y sectores representativos de Santiago. En cada número aparece una exhaustiva rendición de cuentas sobre mis actividades comunitarias y la labor congresional que he venido desarrollando. Se dedica espacio además para la educación y sensibilización sobre temas de interés general, tales como salud, educación, medio ambiente, política y cultura.
Esta revista ha sido posible gracias al denodado esfuerzo de un equipo interdisciplinario que ha tomado el asunto con fervor religioso, en especial quiero mencionar y agradecer al director, Lic. José Tavárez, de quien surgió la idea, al profesor Juan Manuel Sosa, cuyo tesón y entrega ha sido esencial para asegurar la calidad de cada entrega y al Lic. Juan Guerra, destacado lingüista y académico, que ha puesto su mano generosa en los detalles formales de la publicación. No menos valiosa ha sido la colaboración desinteresada de personalidades que prestigian estas entregas, entre ellas quisiera mencionar y agradecer a Minou Tavárez Mirabal, a la politóloga Rosario Espinal, al escritor y filósofo David Álvarez Martín y a la Dra. Carmen Iris Taveras.
Al encarar el reto de ser diputada, en un contexto donde el Congreso era fuertemente cuestionado, nos propusimos contribuir a transparentar y fortalecer a este importante poder del Estado. En ese sentido hemos empezado por cumplir sin dudar con las funciones para las cuales fui electa. Entiendo que la mejor manera de predicar es ejemplo, si queremos un Congreso mejor, nosotros debemos ser mejores, vale decir, mas comprometidos y comprometidas con una gestión efectiva, transparente y correctamente motivada.
He tratado de poner lo mejor de mí en esta gestión, he procurado representar con dignidad a mi provincia, sin defraudar a los miles de electores que confiaron en Magda como diputada. Sé que han habido ruidos en el entorno del Congreso, especialmente en lo concerniente a la Reforma Constitucional en curso, pero no todo se ha perdido, y como dice la canción Desiderata: “el mundo está lleno de engaños, pero no por esto te ciegues a la virtud que puedas encontrar; mucha gente lucha por altos ideales y en todas partes la vida está llena de heroísmo”.
Vayan estos versos como un tributo a los diputados y diputadas, varios de los cuales nos acompañan esta noche, que han encarado con responsabilidad su rol de legislar por los mejores intereses del país, con apego a la institucionalidad del Congreso y representando dignamente a las comunidades que les eligieron.
Actualmente, como se ha informado, presido la Comisión de Género de la Cámara de Diputados. Desde allí he auspiciado el reconociendo y apoyo el liderazgo de la mujer santiaguera y del país, encaminado esfuerzos por construir una cultura de paz, motorizando diversas campañas en contra de la violencia de género. Asimismo me he involucrado en la lucha contra la trata de personas, un mal que afecta a millones de seres humanos alrededor del mundo, especialmente a mujeres, niñas y niños.
Mi compromiso con temas de alto interés humano me ha llevado a participar en diversos foros nacionales e internacionales como “Parlamentarios por la Acción Global”, una entidad que agrupa a legisladores de todo el mundo y cuya misión principal es el fortalecimiento de las Instituciones Democráticas, la Rendición de Cuentas y el Estado de Derecho. La “Red de Mujeres Parlamentarias de las Américas”, que congrega a legisladoras del continente, para abordar temas relacionados con la condición femenina y promover la toma de conciencia en torno a los problemas que afectan a las mujeres de la región.
Durante la campaña que me llevó al Congreso en el 2006 insistí en que mi compromiso con la gente era de doble vía. Esto implicaba para mí el deber de dar la cara y estar presente como legisladora frente a los requerimientos de mi comunidad. Confieso que esta ha sido la parte más ardua de cumplir, pues en una sociedad con una enorme deuda social acumulada, donde el propio Estado se vuelve incompetente, la labor social de una diputada siempre tendrá un alcance limitado.
No obstante estas limitaciones hemos aportado nuestro granito de arena ayudando en la inserción laboral y defendiendo los derechos de los ciegos de Santiago y el país. Apoyando la educación mediante la reparación de butacas, distribución de útiles escolares y la concesión de becas. Contribuyendo a la salud comunitaria ofreciendo consultas médicas, proveyendo medicinas, organizando jornadas para la prevención de enfermedades e impulsando la educación en salud. Realizando acciones solidarias encaminadas al mejoramiento de viviendas, auxilio a víctimas de desastres naturales y ayudas puntuales a personas en necesidad.
Cuando reviso los diez grandes propósitos que me fijé al comienzo de la gestión observo con satisfacción que en todos he trabajo en mayor o menor medida. Noto sin embargo, que en la mayoría de ellos, falta un buen trecho para alcanzar la meta deseada. Esto me recuerda la distancia que a menudo separa nuestros sueños, de lo que podemos lograr en el mundo real. Siento que el principal compromiso es seguir adelante, venciendo obstáculos y sembrando la buena simiente para que produzca el ciento por uno, como nos dice la Sagrada Escritura.
Es por eso que, de cara a este nuevo reto, asumo los siguientes propósitos:
- Mantener el apoyo a los grupos más vulnerables, principalmente a la niñez víctima de abuso o abandono.
- Permanecer al lado de la mujer con miras a seguir superando las barreras legales y culturales que bloquean su plena integración social, política y económica.
- Profundizar los esfuerzos por mejorar los niveles de institucionalidad, transparencia y eficiencia de la Cámara de Diputados, hasta ganarnos el respeto y reconocimiento de la sociedad dominicana.
- Proseguir las reformas al ordenamiento jurídico con miras a brindar mayor protección a los sectores más vulnerables, garantizar el apego a las normas éticas y la rendición de cuentas del funcionariado público e impulsar el desarrollo nacional.
- Mantener la presencia y el compromiso que he venido asumiendo en la representación de los electores de mi demarcación.
- Vigilar para que no se lesionen los intereses del país ni se vulnere su soberanía.
- Redoblar esfuerzos en la promoción de una cultura de paz en el ámbito social e intrafamiliar.
- Reiterar el compromiso de apoyar las políticas públicas orientadas a mejorar la salud y educación de dominicanos y dominicanas.
No quisiera terminar estas palabras sin antes agradecer a Dios por los dones recibidos, empezando con la vida misma. Al equipo de hombres y mujeres que ha hecho posible la realización de este bonito y significativo acto. A los compañeros y las compañeras que me han vendido acompañando en este tramo del camino, con la alegría y el optimismo de que ganaremos una vez más. Agradecer a tanta gente buena, compañeros, compañeras, amigos, amigas, colegas, gente de la prensa, personalidades que nos distinguen con su presencia. A todos y todas, muchas gracias. Tengan la certeza de que de no defraudaré su confianza.
Buenas noches,
Santiago, 8 de octubre de 2009.
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